Alarmada por noticias acerca de prácticas satánicas entre la juventud, una universidad vinculada con el Vaticano lanzó el jueves su curso más reciente: una clase acerca de satanismo, magia negra y exorcismo. La clase se ofrece en la universidad "Regina Apostolorum" (Reina de los apóstoles), una academia pontificia romana dirigida por una orden religiosa. En un caso registrado en Italia en enero, ocho personas que según se cree pertenecían a una secta satánica fueron llevadas ante la justicia por su presunta vinculación con tres homicidios rituales. Una de las víctimas fue una niña de 19 años que murió apuñalada en 1998, y que podría haber sido marcada para morir porque sus asesinos creyeron que era una personificación de la Virgen María, según el prontuario. Los sospechosos pertenecían a una banda de rock pesado llamada "Bestias de Satán". Un tema importante del primer día de clase fue cómo diferenciar entre alguien que está poseído del demonio y alguien que simplemente padece problemas sicológicos. El exorcista romano Francisco Bamonte describió cómo ha colaborado con un grupo de religiosos y sicólogos para determinar si debe practicar o no el exorcismo. "De no hacerlo así, estaría inundado con solicitudes de personas que no me necesitan", dijo Bamonte, quien afirma que realiza una veintena de exorcismos al año. El Vaticano está también preocupado acerca del creciente número de jóvenes que desarrollan formas personales de satanismo, fuera de las sectas que son vigiladas de cerca por la policía. Estos jóvenes reciben con frecuencia sus informes satánicos a través de la internet. "Es un fenómeno más espontáneo y oculto, un problema de soledad y aislamiento, un problema de vacío (espiritual) llenado por los valores del satanismo", dijo uno de los maestros, Carlo Climati, especialista en satanismo y cultura juvenil.
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