Confesiones...

Detrás de las cortinas y a obscuras me escondía para poder ver la silueta que se reflejaba, siempre lo hacia en las noches, ella tenia la costumbre de bañarse a esas horas
Sin embargo jamás la vi desnuda, por lo menos... hasta aquel día

Una noche paseaba a mi perro, llegamos hasta el parque y en una de sus esquinas vi al vecino que agitaba su mano llamándome, al acercarme se encontraba con ella, vestía jeans pegados y un TOP que dejaba ver su excelente figura, la salude con temor y de lejos por aquello de que a mi compañero canino se le ocurriera hacer una de sus gracias. Aun no puedo recordar su nombre. La voz del vecino me aturdía mientras yo me perdía en ella, en sus grandes ojos y la caída de su cabello, pero jamás se daría cuenta, ella no me hacia caso, jamás llame su atención. Parecía como hipnotizada con el vecino y su discurso. De vez en cuando reían y volteaban a verme

- verdad guey?!
- Ehh...sí claro!

Y es ahí cuando aparece la hipocresía, mi carcajada bien fingida y la sonrisa estúpidapara poder hacerme presente en la conversación. Después de un rato ella se despide y consigo poner atención a quien me dice:

-te trae de purititas nalgas, verdad?
-...sí


En mi cuadra las casas eran muy parecidas, grandes ventanales polarizados impedían ver el interior durante el día, pero por la noche la luz encendida en el interior de la habitación daba el reflejo dando el efecto contrario y ahí me tenias, del otro lado, tímido en mi habitación, con la luz apagada esperando el momento en que ella hiciera su aparición...se ha prendido la luz, el show comienza...se apago de nuevo.

Un momento basto para terminar con aquella noche de desvelo.

Después nos volvimos a encontrar en el parque y un hola fue a lo más que llegamos en una conversación, después ella se cambio, jamás la volví a ver.

Billy.

Que?
Ahí acaba!
No en todos los cuentos voy a poner cochinadas...bola de calientes!

jajajajaja